Javier es policía en Sevilla. Lleva una vida tranquila y ordenada.
Con todas las situaciones bajo control. Cuando Paula, una veterinaria madrileña, impulsiva y rebelde, irrumpe en la vida de Javier durante unos carnavales, este verá como su apacible mundo se desmorona.
Intentará alejarla de él, a pesar de lo mucho que la desea.
Paula no cesará en su empeño por conquistar a ese hombre, volviéndole adicto a ella.

Sabe que el sexo explosivo que tiene con el policía es una tentación demasiado grande para él y jugará todas sus cartas para conseguirle.